16 de septiembre 2019

La Vera Cruz bendice Caravaca al finalizar la fiesta de su Exaltación

“¡Caravaca, despierta a la fe, ponte en pie y anuncia el tesoro de gracia que has recibido!”. Así animaba el Obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, a los caravaqueños el pasado sábado, 14 de septiembre, durante la celebración de la Exaltación de la Vera Cruz.

Una vez más, Mons. Lorca celebró junto a los caravaqueños esta fiesta recordándoles que la entrega de Cristo y su muerte en la cruz “han sido por amor, sólo por amor, para rescatarnos de la desesperanza y abrirnos el camino hacia el Padre”. El Obispo destacó, además, la “experiencia de los mártires y de los testigos de la fe” como una característica de la Iglesia, durante toda su existencia, de fidelidad al Evangelio. “Pido a Dios que, al venerar el signo de la Cruz, os conceda un corazón grande para amar, capacidad para percibir las necesidades de los hermanos y la fuerza necesaria para ayudarles”, subrayó Mons. Lorca.

Al finalizar la misa, comenzó la procesión con la Sagrada Reliquia alrededor del recinto amurallado. Bajo palio, el Obispo portó el Lignum Crucis acompañado por los Armaos, la compañía que custodia a la patrona de Caravaca cada vez que abandona su santuario; la hermana mayor, María del Carmen López, y su junta representativa; y cientos de caravaqueños. Terminada la procesión, Mons. Lorca bendijo con la Vera Cruz la ciudad y sus campos desde los cuatro puntos cardinales.

Homilía de Mons. Lorca Planes